Yacatsu Gáratsu 蛇蝎唐津
Los dos primeros canyis
de su nombre significan serpiente y escorpión, respectivamente. Y
los dos últimos se leen Gáratsu, es decir cerámica Káratsu. El cambio a
“g” en lugar de “k”, que también hemos visto en anteriores entradas, suaviza el
choque fonético.
Se le considera una
variedad de Cáratsu Negro (“Curó Gáratsu” 黒唐津, tiene
entrada),
y se le llama así porque el esmalte forma en su superficie un paisaje de
dibujos moteados con tonalidades blancas sobre un fondo negro que nos recuerda
la piel de la serpiente o del escorpión, o incluso la del
lagarto.
Yacatsu Gáratsu se hace en el periodo Can Ei (1624 a 1644) de la época Edó (1603-1868).
Hay
tres teorías sobre cómo obtenían este esmalte.
En
una de ellas se aplica primero esmalte negro (parece
que en realidad es el engobe Doroyuu 泥釉. Hay imágenes en la entrada Curo Gáratsu) y encima de
este, un esmalte blanco opaco con alto porcentaje de feldespato. Este modo de
obtenerlo es idéntico al de los chauanes Curó Óribe (黒織部茶碗) de la cerámica Mino (美濃焼). Y esta aparente influencia no solo la encontramos
en su forma de trabajar, sino también en las formas de los abundantes chauanes
en forma de zapato (“cutsú chauán” 沓茶碗) y cuencos
en forma de zapato (“cutsú bachí” 沓鉢) que
hacían en la cerámica Yacatsu Gáratsu.
Otra
teoría dice que primero aplicaban sobre toda la pieza un esmalte de ceniza.
Sobre éste, un esmalte de hierro, y cubriendo estos dos, un transparente con
muy alto porcentaje de feldespato.
Y
por último, una tercera teoría mucho más simple, se limita a aplicar primero el
esmalte negro, y encima un transparente, o semi opaco, muy feldespático.
En
todas ellas, el hierro fundirá y saldrá de debajo del feldespato formándose las
escamas.
Yacatsu Gáratsu parece
haber sido una de las últimas iniciativas del daimió y maestro de té Enshu
Cóbori (1579-1647.
Véase la entrada “Dibujos azul cobalto Shonshui 1628-1644”).
Se cree que su intención era copiar el esmalte de la cerámica Sátsuma, muy
parecido. Estos introducían ceniza de paja para controlar la fusión del esmalte
blanco.
Actualmente
queda muy poca obra antigua. Fue un trabajo relativamente abundante del horno Shoocodaniyoo 祥古谷窯 (Algunas fuentes
lo nombran Sookoya. Sus destrozadas ruinas están en la ciudad de Takeo, al pie
de la montaña Takécobá, a la entrada de un valle. Era un horno ascendente
escalonado, con cámaras de 2,2 mts. de ancho y 2 de hondo. Una longitud
total de unos 20 mts. Y una inclinación que va de 10º a 5º por lo que podemos
pensar que su estructura estaba pensada para frenar la velocidad del fuego).
Otros hornos también en la ciudad de Takeo, prefectura de Saga,
fueron: Risoocobayoo 李祥古場窯 (Al pie occidental del
monte Takékobá. Ascendente escalonado
como el anterior. 52 mts. de longitud, y alrededor de 21 cámaras. Estuvo en
funcionamiento a principios del XVII. Es una muestra bien conservada de la
historia de la cerámica), Conácoonotsuyíyoo 古那甲ノ辻窯, y por último Inócobayoo 猪ノ古場窯.
Y en la vecina prefectura de Nagásakí, ciudad de Sasebo, cierto ceramista
japonés discípulo del coreano Kin Kiuei 金久永 puso en marcha el horno Ushíishiyoo 牛石窯, en la zona del mismo nombre, pero a los
pocos años fue abandonado (En la
entrada Kuró gáratsu encontrareis un “toccuri” en forma de boniato de este
horno).
La foto de cabecera es un chauán en forma de zapato. Principios de la época Edó. Se cree que fue cocido en el horno Shoocodaniyoo. Altura 8,1 diámetro 12,9 cm. Colección del Museo de Cerámica Oriental de Fucúocá, Japón.
Joaquín Mira ..., y la colaboración de Kúmiko Nagátsuka 長塚久美子.
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